Con la salida de Angela Merkel del gobierno y la llegada de una amplia coalición de socialistas, ecologistas y liberales de izquierda, llega al Ministerio de Salud alemán, el Dr. Karl Lauterbach, también conocido como el “Fauci alemán”.
El Dr. Karl Lauterbach, un fanático de las cuarentenas y militante de la vacunación forzosa de la población, durante su primer discurso luego de la nominación que “la guerra contra el COVID-19 recién empieza”. “Gestionaremos. La vacunación jugará el papel central«. Y agregó que la inmunidad solo será alcanzada cuando el 100% de la población esté vacunada, incluido niños, además de poner de sobre aviso a la población alemana que dos dosis no seran suficientes para obtener el pase sanitario, si no que será necesaria una tercera dosis.
Lauterbach, habló extensivamente sobre incluir la vacuna contra el COVID-19 en el esquema obligatorio de recién nacidos: los padres que no le den esta vacuna se arriesgan a perder la tenencia.
Pero, las locas ideas del doctor no vienen solas, vienen acompañadas de una propuesta de sistema de salud universal, público, que no compita contra salud privada, y que le entregue al Estado la potestad de la salud de los ciudadanos, además de exigir a su partido que la discusión sobre las “diferencias en riqueza, ingresos, educación y salud”, sea abordada desde la izquierda, para que no pierdan «Poder y Honor», palabras que recuerdan sorprendentemente a la doctrina nazi.
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