En una entrevista publicada el sábado 2/07, el director de la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio (NASA) de USA, declaró que China y su país se encuentran en “una nueva carrera espacial por la conquista de la luna”.
Bill Nelson, en tono de advertencia, explicó cómo según investigación de la NASA, se habría descubierto la estrategia del gobierno de China de construir una base en la luna conjuntamente con Rusia para “apoderarse del satélite”.
Sin embargo, un día después de las declaraciones de Nelson, el gobierno de Xi Jinping desmintió completamente por el portavoz del ministerio de Relaciones Exteriores de China, Zhao Lijiang.
Bill Nelson, en una entrevista con la revista BILD, reveló que se encuentra “preocupado por el aterrizaje de China en la Luna”, e instó a todos sus compatriotas a evitar que China “se adueñe de la luna”.
Según las declaraciones de Nelson, es muy probable una competencia por controlar el polo sur de la Luna debido a la presencia de depósitos de agua que podrían utilizarse para fabricar combustible para cohetes.
Consultado acerca del objetivo de la presencia china en el espacio, respondió:
El director de la NASA hacía referencia a las nuevas tecnologías espaciales elaboradas en China que, según él, se crearon con el fin de atacar a otros cohetes y a otros países.
Sin embargo, desde el gobierno chino se planteó que en realidad, la tecnología de la que habla Nelson fue hecha para “atrapar” satélites con brazos robóticos o redes o hacer que se estrellan, con el fin de limpiar sus propios desechos espaciales.
El plan espacial de China
Para situar el contexto, la base espacial china a la que hace referencia Bill Neson forma parte de un programa elaborado conjuntamente con Rusia, que estipula formalizar una base espacial en la luna para el año 2036.
China y Rusia plantearon repetidamente que la base lunar que las dos partes están construyendo será «abierta e inclusiva», enfatizando el uso pacífico del espacio exterior y que el proyecto da la bienvenida a todos los socios internacionales interesados en la cooperación.
Según lo argumenta el Global Times, el diario oficial del Partido Comunista Chino: