Para relatar y comprender los hechos que están sucediendo en la Patagonia Argentina es necesario poner algunas cuestiones en contexto por ejemplo el verdadero carácter del territorio sur de ese país y sus habitantes.
De geografía compleja y variada ha necesitado la mano del hombre para volverse un vergel y también para conservar espacios naturales como patrimonio nacional o provincial según el caso, lo que no se cuestiona es la necesidad de preservar dichos espacios, desde el litoral marítimo hasta la cordillera de los Andes cambia el paisaje y las condiciones de habitabilidad, la Patagonia es dura, requiere de amor trabajo y sacrificio, soslayada mucho tiempo por los argentinos y valorada por los inmigrantes que la conformaron, podemos decir a grandes rasgos que fueron españoles, croatas, suizos, alemanes, rusos, australianos, sirios, italianos, húngaros, franceses, escoceses y galeses los que se animaron a ella, los que defendieron sus mojones desde la gran inmigración, luego algunos argentinos también fueron e invirtieron en en el auge del alto valle de Rio Negro, construyeron canales fertilizaron la tierra, iniciaron la agricultura y la ganadería e instalaron pueblos y ferrocarriles, de esa manera se define una población humana trabajadora que con la promesa de progresar accedió a tierras de forma legítima y se instaló en ellas.
Ahora bien, serios conflictos por violación a la propiedad privada se desarrollan en este territorio, especialmente en lago Mascardi y no son los pueblos originarios los que los provocan, ya en el año 2003 en una nota del diario El Clarín cita esta región como la que tiene el promedio más alto en este tipo de delitos.
Incendios, asaltos, usurpaciones a mano armada, hostigamiento, incontables intentos de avanzar sobre la propiedad asolan a los pobladores y por estos días en plena pandemia, cada vez con mayor virulencia.
Se dicen mapuches aun en contra de lo que dicen los verdaderos mapuches y es que no lo son, relatan lugareños que los usurpadores son integrantes de diferentes agrupaciones políticas y llegan de a montones, en autos particulares, buses y hasta remises, proceden principalmente del conurbano bonaerense y de Rosario de Santa Fe, se han instalado muy precariamente y oh noticia publican las tierras en venta en las redes sociales.
Hablemos de las agrupaciones políticas y sus representantes piqueteros y terroristas, ¿Sorprendente? No, que podría sorprender si Fernando vaca Narvaja (Frente Para la Victoria) intento ser intendente de Bariloche y siendo honestos más allá de las excusas políticas del momento fue el mismo Bariloche quien lo rechazó de plano a pesar de haber llenado de camporistas la ciudad a los que se les entregaba un certificado de “Usurpación precaria” para que con eso gestionaran los servicios y luego la propiedad de la tierra en algo que es claramente poco legítimo.
“Nuevo encuentro unidos y organizados” Agrupación política liderada por Martin Sabatella, que tiene sedes en distintas partes del país y casualmente una en El Bolsón, calle Beruti 519 desde allí operan intelectualmente una de las ramas lo que hoy es claramente una avanzada terrorista que amedrenta y pretende someter a los pobladores pero también están ocupando de manera ilegal 60 hectáreas correspondientes al Mirador del Azul y Cabeza de Indio. Los pedidos del intendente Bruno Pogliano no tuvieron repercusión ante la justicia federal, y es que corresponde la intervención de la Gendarmería Nacional, desde adentro de la fuerza se filtran rumores respecto de que temen ser sancionados si toman cartas en el asunto y la ministro de seguridad de la nación, Sabrina Frederic, no solo no se da por enterada, sino que denuncia penalmente a los ciudadanos de Río Negro que se manifiestan en contra de la violencia y las usurpaciones.
Mientras tanto, la gobernadora de Rio Negro, Arabela Carreras (Juntos somos Rio Negro, FPV) se reúne con Sabatella y con Wado de Pedro, nadie sabe para qué, lo que si queda claro es que no es para garantizar la seguridad jurídica, constitucional y los derechos de los ciudadanos de bien y de trabajo.
Tampoco podemos obviar el fogoneo de Juan Grabois, quien mantiene permanente relación con comunidades y “comunidades” de El Bolsón y Bariloche, este personaje no se priva de alentar, amenazar y plantear de manera extorsiva la toma de tierras a través de todas sus declaraciones y posteos en redes sociales. La otra cabeza visible del conflicto es Juan Fernández, fundador de la cooperativa Awka Mallín e hijo de un ex intendente involucrado en un homicidio en Junín De Los Andes, quien esta semana se ofreció como interlocutor entre vecinos y municipios, poco claro el rol.
Por último y en un delirio místico aparece una joven de 19 años, Betiana es su nombre y es la “machi de la comunidad mapuche Lafken Winkul” así todo entre comillas porque dicha comunidad instalada por ella en el Parque Nahuel Huapi en Villa Mascardi,a razón de haber recibido un “designio divino o mensaje sobrenatural” hicieron base allí desde hace tres años ya, para para cortar cada tanto la ruta 40, para recordarle a todo aquel que quiera transitar libremente el suelo argentino, de su existencia. También dicho sea de paso para encabezar una serie de robos, agresiones, cuatrerismo y amenazas a los vecinos de Villa Mascardi.
Esta comunidad no está registrada en el INAI y no cuenta con el reconocimiento de otras comunidades de la zona. Una organización delictiva, digamos todo.
Uno de los damnificados cuyo audio pidiendo auxilio se viralizó en estos días, el señor Diego Frutos da testimonio de la desesperante situación en la que viven, su cabaña “La Cristalina” fue incendiada y en dia de ayer atacado a piedrazos mientras intenta resistir la avanzada en resguardo de su propiedad e integridad física.
¿Respuestas? No las hay, solo preguntas, ¿Qué subyace detrás de todo esto? ¿Es un negocio inmobiliario? es puro deseo de aniquilación del Estado de Derecho? Porque nadie escucha y nadie brinda respuestas ni garantías a un sector de la sociedad que solo parece tener obligaciones.
