La intendenta de Nueva Colombia, Lida Escobar, expresó su rechazo al reajuste en los costos del peaje en el tramo Luque – San Bernardino, calificándolo como un “golpe muy fuerte” para la clase trabajadora. Según recordó, el costo del peaje había aumentado G. 5.000 en el año 2024, y a principios de este 2025 se decretó una nueva suba de igual monto, lo que eleva el costo total a G. 15.000 para vehículos livianos.
Este incremento ha generado una fuerte reacción entre los habitantes de la región, quienes consideran el reajuste como excesivo e insostenible, especialmente para los sectores que dependen del transporte como medio de subsistencia.
Movilizaciones y reclamos al MOPC
En respuesta al aumento, la comunidad ha organizado una serie de manifestaciones previstas para el próximo fin de semana. Escobar anunció su apoyo a estas movilizaciones, las cuales buscan exigir al Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC) que se restablezca el costo anterior del peaje de G. 10.000.
“Para este fin de semana se están autoconvocando a manifestaciones los volqueteros y cantereros, se están organizando con mayor fuerza para volver a las calles. Vamos a estar acompañando y pediremos que todo sea pacífico”, señaló la jefa comunal, enfatizando la necesidad de mantener el orden durante las protestas.
Impacto económico y social
El incremento del peaje no solo afecta a los transportistas de la zona, sino también a los trabajadores que utilizan este tramo de manera regular, agravando el costo de vida y generando presión económica adicional en un contexto ya desafiante para las familias de la región.
La comunidad espera que las movilizaciones generen una respuesta favorable del MOPC para aliviar el impacto en los sectores más vulnerables. Mientras tanto, la convocatoria a las protestas sigue sumando adhesiones en busca de revertir la medida.