Durante la revolución francesa los bandos políticos en disputa, los girondinos y los jacobinos, no solo tomaron posiciones políticas respecto al Antiguo Régimen, sino que se sentaron a la derecha e izquierda, respectivamente. Los intelectuales de La Gironda, eran conservadores, pretendían conservar las instituciones existentes, de naturaleza monárquica, eso sí, agregándole un órgano de “control a la inglesa” de carácter parlamentario. Por su parte, los intelectuales del Convento de los jacobinos, denominados montañeses o jacobinos, propiamente, insistían en demoler las instituciones existentes para que el progreso pueda empujar la historia hacia adelante.
Hoy, veremos si esas calificaciones siguen siendo útiles para entender la política.