El presidente argentino, Javier Milei, tomó la decisión de que la Argentina dé un giro diplomático y se distancie de los regímenes autocráticos de América Latina. No habrá embajadores argentinos en Cuba, Venezuela y Nicaragua, y de esta manera se romperá relación con los dictadores Miguel Díaz-Canel, Daniel Ortega y Nicolas Maduro.
La decisión también traerá aparejado un cambio de relaciones con otros países del continente. Brasil, Colombia y México son países muy cercanos a dichas dictaduras caribeñas, por lo tanto también habrá que seguir de cerca el vínculo con los presidentes Lula da Silva, Gustavo Petro y Andrés Manuel López Obrador.
Javier Milei ya había dado indicios de esta postura al no invitar a su asunción presidencial a Miguel Díaz-Canel, Daniel Ortega y Nicolas Maduro. En la misma línea diplomática, el presidente también borró de la lista a Ebrahim Raisi, dictador de Irán.