El nuevo Plan de la Niñez y la Adolescencia 2020-2024 se encuentra en proceso de reelaboración y está a cargo de una comisión redactora integrada por quienes fueron seleccionados por la Comisión Nacional de la Niñez y la Adolescencia (CNNA), organismo compuesto por varias instituciones y representantes de sectores de la sociedad.
El plan anterior presentado en el 2020 fue dejado sin efecto tras denuncias de irregularidades por parte de organizaciones civiles y representantes de padres de familia, la mayoría de los cuales se encuentran aglutinados en la Red Ciudadana por la Niñez y la Adolescencia.
El 29 de julio pasado, el CNNA resolvió crear una comisión redactora del nuevo plan y las organizaciones convocadas para tal fin fueron notificadas y recibieron un borrador del nuevo plan por parte del Ministerio de la Niñez y la Adolescencia (Minna). Las organizaciones que objetaron el plan fueron notificadas de la resolución el 2 de setiembre, más de un mes después de dictada la resolución.
A pesar de participar de manera activa en todas las reuniones del CNNA, la representante de la red ciudadana, integrada por más de 30 organizaciones civiles y de padres familia, la abogada Valeria Insfrán, denunció que fueron dejados de lado en esta selección para integrar la comisión redactora. La Nación conversó con Valeria Insfrán para conocer sobre la situación actual del proyecto.
– ¿Por qué no están de acuerdo con la conformación de esta comisión redactora?
– Al tener noticia de la resolución del CNNA, tomamos conocimiento que se dejó de lado a las organizaciones que se hallan adheridas a la Red Ciudadana por la Niñez y la Adolescencia, que está integrada por asociaciones de padres y organizaciones de la sociedad civil, quienes participaron durante nueve meses de todo el proceso convocado por el Minna y ninguna de ellas fue convocada a los efectos de integrar esta comisión redactora.
Por otro lado, nos percatamos que llamativamente la única “organización de padres” que apoya al plan anterior, sobre todo en su línea ideológica, sí fue convocada y está representada en la mesa, a pesar de no haber acompañado el proceso de principio a fin. Su representante a lo sumo participó una o dos veces.
La organización a la que hago mención es Feipar (Familias por la Educación Integral en Paraguay), de la cual tomamos conocimiento de su existencia el año pasado en vísperas de la audiencia pública en la Cámara de Diputados, a la que la ministra Teresa Martínez fue invitada y no se presentó.
– ¿Cómo se explica que ellos hayan sido seleccionados y ustedes no?
– Nos llamó poderosamente la atención esta supuesta asociación de padres y, luego de algunas averiguaciones, resultó ser que la persona que está a la cabeza de esta organización es una exfuncionaria del Minna, durante el gobierno de Fernando Lugo, reconocida activista feminista y proaborto. Repito, es esta la única “organización de padres” que apoya al plan que fue denunciado el año pasado y que hasta ahora aboga por redactarlo manteniendo los conceptos y los principios originales.
– Pero la red que representa, ¿finalmente integrará la comisión redactora?
– Hasta este momento, la Red Ciudadana que represento no integra la comisión redactora, desconociendo nuestra activa participación en el proceso de discusión durante nueve meses. Pero debo aclarar que la Pastoral Familiar de la Iglesia católica me pidió que integre la comisión redactora en representación de la pastoral mencionada. Es una responsabilidad muy grande y esto se dio gracias al apoyo de un equipo humano comprometido.
Estamos llevando esto adelante y es por ello que tomamos la decisión de mantener informada a la ciudadanía. En esta comisión redactora del Plan de la Niñez y la Adolescencia 2020-2024 nos debatimos por un lado los provida, representantes de las iglesias evangélica y católica, representantes de federaciones de padres y por otro lado los funcionarios del Minna, representantes de oenegés, organizaciones indígenas y la mencionada Feipar.
– ¿Ya iniciaron los trabajos de esta comisión redactora?
– Se leyó el borrador del plan hasta la página 26 de las 40 que contiene el documento y prácticamente todos los puntos fueron objetados por uno u otro grupo, por lo que se dispuso un cuarto intermedio para que en 15 días cada organización acercara sus objeciones y un texto alternativo a lo objetado. Esto es lo que dispone el procedimiento que establece el reglamento interno de la comisión.
Cuando este trabajo de objeciones y presentación de redacciones alternativas esté concluido, el documento se elevará al CNNA y a la Vicepresidencia de la República para que estos determinen cómo quedará el nuevo Plan de la Niñez 2020-2024.
Por tanto, así como están las cosas, la última palabra la tendrá el vicepresidente Hugo Velázquez. La ciudadanía preocupada por sus hijos tiene puesta la mirada en él y esperamos que este gobierno demuestre con hechos que es provida y profamilia como lo ha repetido en tantas ocasiones.