Un grupo de congresistas republicanos liderados por Rich McCormick (Georgia) y Roger Marshall (Kansas) ha exigido a la Organización Mundial de la Salud (OMS) que abandone sus políticas y posiciones relacionadas con los procedimientos de cambio de sexo porque, en caso contrario, el país se alejaría del organismo.
A través de una carta remitida directamente al director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus; McCormick, Marshall y el resto de los republicanos firmantes aseguraron que el organismo ha manipulado las evidencias científicas que demuestran lo dañino que son las cirugías y los tratamientos de cambio de sexo en las personas. Además, reflejan que la organización ordena a los países cómo deben gestionar el asunto a través de un grupo específico denominado GDG.
«Nos dirigimos a usted para hacerle partícipe de nuestra gran preocupación por la propuesta de la OMS sobre la salud de las personas trans y de género diverso. Ha estado rodeado de secretismo, irregularidades y profundos conflictos de intereses. Muchos miembros del GDG están envueltos en un escándalo de manipulación de pruebas científicas», escribieron los republicanos. «Incomprensiblemente, el panel pasa por alto las revisiones de las pruebas sobre seguridad, eficacia, riesgos y costes del tratamiento de la disforia de género con intervenciones médicas, incluidos los fármacos para el cruce de sexos. En su lugar, pasa directamente a considerar cómo los países deben proporcionar dichas intervenciones e imponer la marco altamente controvertido y negador del sexo de la ‘identidad de género’, incluso a través de la ‘autoidentificación’ legal».
«Esto se parece mucho a una campaña de marketing global más que a una evaluación honesta de las pruebas médicas», concluyeron, pidiendo también que «disuelva» es grupo específico.
Por su parte, Marshall fue más allá y aclaró que, en caso de que la OMS continúe por esta línea, Estados Unidos debería cortar lazos con el organismo.
«El culto a la ‘identidad de género’ de la OMS y su aceptación de cirugías de mutilación irreversibles y terapias químicas psicológicamente dañinas son sólo una de las muchas razones por las que Estados Unidos debe alejarse de esta organización globalista», declaró Marshall.