El Congreso español aprobó definitivamente este jueves una ley que autoriza la libre autodeterminación de género a partir de los 16 años, una iniciativa que causó un acalorado debate en el seno del gobierno de izquierda y el movimiento feminista.
El texto, aprobado por una amplia mayoría de diputados, suprime los requisitos que eran necesarios hasta ahora para cambiar de género -un informe médico que diagnostique disforia de género y una prueba de tratamiento hormonal por dos años-, mientras que extiende el derecho a jóvenes de entre 12 y 16, bajo ciertas condiciones.
La ley reconoce la voluntad de la persona como único requisito para cambiar de sexo en el registro, y en el caso de los menores de 16 años y mayores de 14 tendrán que asistir con sus padres o tutores. Solo será necesaria la intervención de un juez para el cambio registral cuando tengan menos de 14 años y más de 12.
Los menores de doce no podrán cambiar de sexo en el registro, pero sí su nombre en el documento de identidad (DNI).