La final del Mundial de Qatar 2022 se disputó hace ya seis días, pero aún sigue teniendo repercusión y es que los franceses siguen indignados por haberse quedado sin levantar el trofeo. En este caso, los reclamos caen sobre el árbitro del encuentro, Szymon Marciniak, quien, según los galos, debería haber anulado el segundo gol de Lionel Messi, el encargado de poner el 3-3.
Esto se debe a que antes de que la pelota ingrese en su totalidad, hubo algunos jugadores de la Selección Argentina que ya estaban dentro del campo festejando y, según las reglas de la FIFA, esto no es legal.
Sin embargo, Marciniak ha respondido con la misma altura… «¿Cuál fue el impacto de los jugadores que se levantaron y entraron al campo? Para anularlo debería afectar afectar al partido. Los franceses no mencionaron la foto donde podemos ver que hay siete franceses en el campo cuando Mbappé anotó», aseguró el árbitro mientras mostraba una imagen del hecho.