sábado, 23 noviembre, 2024

La ilusión de la elección

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Lo importante es que el pueblo sepa o crea diría yo, que hay elecciones, que existe el show, entonces, aquí entra la frase célebre de Joseph Stalin: «No importa quien tenga las votos si no quien cuenta los votos, estos lo deciden todo, los que votan no deciden nada». La primera parte que no está entre comillas también lo dijo Stalin así como la última, palabras más palabras menos.

No me gusta escribir como se debe, tipo abc color que siempre escribió con aparente decencia y se pasó avalando los peores gobiernos de la historia y criticando al mejor. Y como aquí casi nadie se porta como se debe si no se le amedrenta, yo escribo de acuerdo a nuestra sucia realidad con el lenguaje procaz que la mayoría de esta sociedad usa y entiende.

Si hay algo que me sulfura, que me rebela, que me pone bravo chico, es la hipocresía, por eso siempre escribo enojado, es lo que más abunda entre nosotros al igual que la tibieza, lo que demuestra que este pueblo no es verdaderamente cristiano. Lo siento.

Entonces, escribo de acuerdo a como somos y no como debemos ser, porque estamos lejos de la decencia, de ahí qué, podría decirse también, que Abc Color con toda su gente decente es una pléyade de hipócritas, claro que sí.

No por mucho que digas que la pera es manzana se convierte en esta. La prensa toda utiliza el principio goebbeliano de propaganda nazi de que una mentira mil veces repetida se convierte en verdad, es así como se les llama presidente, senador, diputado, ministro y jueces a esta caterva de bandidos hijos de su puta que en verdad no los son, no obstante, Mahatma Gandhi deshizo este principio cuando dijo: «No porque todo el mundo cree en la mentira se convierte en verdad» Tomá, comé.

Pero alguien aún con mayor autoridad como el profeta Isaías dijo: «¡Ay de los que a lo malo dicen bueno  y a lo bueno malo; que hacen luz de las tinieblas y de las tinieblas luz; que ponen lo amargo por dulce y lo dulce por amargo». Me recuerda un poco a Stroessner, un poco nomás, salvando las distancias, cuando en algunos discursos decía: «¡Guay de aquel!»
Siendo así, comenzamos nuestro análisis con un ejemplo contundente, uno solito, como un botón de muestra que refleja fidedignamente nuestra realidad política. Podemos titularlo de la siguiente manera; «El puto, los votos, la camioneta y Oviedo Fatto». ¿Se acuerdan chiques? No creo, a ver, la historia comienza así:

«Le hice un lugar aparte, una vivienda dentro de la mía, para que esté cerca y deje de hacerse dar, sin embargo, voy y le encuentro en la cama con un tipo, en verdad como diez veces con el mismo«, esto lo dijo el papá de Rodolfito el putito en declaraciones públicas, sí, el mismo que aparece abrazado en todas las fotos actuales con Drogacio.

El otro no era ningún putito si no un putazo, el Iturburu este encargado de la parte informática de la Injusticia Electoral que le «dio» 22 mil votos en forma virtual a Oviedo Fatto a cambio de una camioneta y seguramente tuvo que poner el culo también. Esto lo convirtió nuevamente en «senador» al oviedista quien finalmente fue defenestrado, ¿por trucho, por fraude? claro que no, si fuera así todos los mal llamados senadores deberían ser cesados.

Fue por el affaire con una fiscalita a quien le pidió 5000$ y no por servicios sexuales, el término affaire también se usa para otros asuntos. Grabación de por medio que siempre tiene en exclusiva el diario del lenguaje decente cuyo proveedor es siempre la misma embajada que se pasa «espionandonos» como dijo un ex diputadete. Estas escuchas telefónicas son una vejación constitucional de aquellas, pero el diario de la gente «decente», en vez de investigar y denunciar el espionaje, prefiere utilizarlo en su favor. ¡HIPOCRITAS!
Ironía, desde que se fue Stroessner hubo solo un gobierno semi legítimo y no fue colorado, el del ex cura, y los resultados del mismo en comparación con el resto hasta el día de hoy son superiores, en realidad, el único comparable al del Rubio, ¡JA! Espectacular. Y los antistronistas de siempre, pererí y kuña´i, no tienen argumentos, no pueden refutar los fundamentos de uno de los mejores gobiernos de la historia del Paraguay, para algunos incluso el mejor, por eso hablan impúdicamente e irrespetuosamente de la supuesta vida sexual del General y sus víctimas en las mazmorras. A cambiar el disco.

Lugo ganó porque el tramposo partido colorado se dividió y entonces cayó, no hubo esta vez a quien «trumpearle», pero el legítimo ganador no se portó como debió según los cánones del globalismo al acecho. El Paraguay en tres años creció 14% económicamente, había rock n roll y la gente estaba bastante bien. Sucede que como no hizo mucho más que fornicar para no decir coger, dejó hacer, entonces los verdaderos actores de la producción y generación de riqueza trabajaron mejor; el sector privado. Otro punto importante fue que le dio la llave del cofre a Dionisio Borda, estaba en buenas manos.

Un país con un crecimiento económico entre los tres mayores del mundo, con gente feliz, las más feliz del mundo según Gallup y el rock n roll de fondo -vinieron los mejores grupos del género más viril de la música popular del planeta durante la administración Lugo- ohh nooo!! ¡Muy mal ejemplo! ¿Cómo dominarlo después? ¿Cómo hacerles entrar en el infierno si ya casi tocan el cielo?

Irónico también, que los detractores de Lugo, al igual que los de Stroessner, apuntan sus dardos críticos exclusivamente a su vida sexual, siempre la cuestión sexual, pero lo político, económico y social parece no ser prioritario cuando se juzga a un gobierno nacional. Esto se llama falta de argumentos. ¡Gente estúpida! ¡Y mucha! ¡Sexopatas!

Entonces se le hizo la cama y a la mierda el único gobierno legítimo de la «democracia» que para peor, los zurdos se victimizaron con la pregunta: «¿Que pasoó en Curuguaty?», cosa que provocó rechazo en la mayoría ciudadana, no por la pregunta si no por los zurdos.

Demás, estúpidos para preguntar, ¿no pueden deducir acaso? Son unos tristes boludos. Les voy a dar un tip, de manual encima; «golpes blandos de la puta CIA». Los mismos yankis de siempre, de mierda, del establishment anti-Trump, como el embajador que decidió que Marito sea el mal llamado presidente, porque el verdadero no es, por más que lo repitan mil veces, ni a Efraín le ganó.

Así que en Bolaguay todo es trucho, ese es el deber ser de los bolaguayos, y si no lo es pues que sea, o sea, que no sea, ni verdadero ni auténtico ya que esa levadura puede leudar toda la masa y acabar con el truchaje. Es por eso que el candidato de mayor arrastre popular, con la mayor cantidad de votos en la historia del Paraguay, el que generó un fenómeno político por su liderazgo; auténtico, autóctono, popular y patriota, no pudo llegar; Lino Cesar Oviedo.

Fue la verdadera amenaza de tener un gobierno completamente legítimo y representativo del pueblo paraguayo. La posibilidad que se cumpla el axioma democrático «el pueblo al poder» hizo entrar en pánico a la casta criminal de los políticos huérfanos de respaldo popular e ilegítimo por el fraudulento sistema electoral que Oviedo venció una y otra vez ahogándolo con su enorme caudal electoral. Esta es la pura verdad. Fue una gran amenaza democrática en el Paraguay que naturalmente iba a barrer como escoba nueva todo el truchaje instalado en los tres poderes del Estado que quedó destrozado luego de impedir que Oviedo llegue a la presidencia legítimamente. No necesitaba transar con nadie.

Como me dijo un colorado tapado; «este es un sistema enfermo de gente enferma enemiga de lo legítimo, la trampa es la norma, ni siquiera para que gane un candidato sino más para que no llegue el verdadero ganador». Pueblo de envidiosos, malos y mediocres, cuánta razón tuvo la esposa de Benigno López quien por la presión de aquellos pidió perdón por decir la verdad, pobre dama. Como les dije más arriba, si algo es legítimo hay que corregirlo porque en Bolaguay todo debe ser trucho. ¿Por qué? Porque lo verdadero y auténtico desnuda al resto que no lo es, son como el bastardo que siempre quiere ser el legítimo pero no puede, de ahí que es un usurpador por naturaleza. Así comenzó la historia occidental, primero con Ismael e Isaac y luego con Esaú y Jacob, pero cuidado que estos ejemplos pueden ser mucha arena para ciertos camioncitos.

Y es así como estamos hoy día en «democracia», sin un ápice de legitimidad de ninguna «autoridad» en Bolaguay, llenos de Ismaeles y Esaúes y los medios siempre fueron los encargados de «legitimar» lo trucho repitiendo las mentiras miles de veces. Dense cuenta que medios y política se retroalimentan, se nutren generando el humo y el polvo de todos los días, pero todo es bola, desde la raíz como solía decirme Edgardo Villalba Viccini todos los días al cruzarnos en el estudio de canal 9.

«¿Cuál es la diferencia clave entre los países desarrollados y nosotros?» me preguntó una vez el operador e historiador Nestor Paiva»; «En aquellos se mienten menos» fue lo primero que me salió de la boca. Y para reforzar, he aquí lo que dijo el fabuloso escritor mexicano Octavio Paz: «La mentira política se instaló en nuestros pueblos casi constitucionalmente. El daño moral ha sido incalculable y alcanza a zonas muy profundas de nuestro ser. Nos movemos en la mentira con naturalidad…de ahí que la lucha contra la mentira oficial y constitucional sea el primer paso de toda tentativa seria de reforma».

Imagínense que en el propio Código Electoral bolaguayo está escrito que el voto no es el voto si no que el acta electoral es el voto, la cual, siempre se falsifica o se manipula en las mesas, el voto se tira y se les llama a las papeletas donde está la elección de la gente ¡»basura electoral»!. ¿Pueden imaginar peor burla que está a la democracia? ¿Cómo luego puede haberla con las famosas y nefastas listas cerradas?

«¡La gente no decide un carajo!» me dijo un barón de Itaipú tomando café en un coqueto barrio de Miami; Coconut Grove, o sea en Mbocayaty. Y ni hablar de las encuestas, todas, pero todas truchas, a platazo limpio, asqueroso, como el Taka-Chase que murió de podrido que estaba por la corrupción, Ati Snead que sigue poniendo el orto por unos mangos a pesar de su edad, ¡un poco mas de dignidad por favor! a cualquier puerco que le proponga. Panchito Capli que tartamudea todo cuando explica sus encuestruchas porque sabe que miente de aquí a la Luna.

En fin, en Bolaguay todo lo institucional es falso, nada es verdadero por ende nadie es legítimo en su puesto, es todo una feroz bolaterapia y creo que lo sabemos, lo percibimos al menos. Esto es lo que hay en Bolaguay, y guay de aquel que quiera cambiarlo, la falsedad es lo principal en el cobarde Paraguay.

Shana Tova

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