Las verdaderas emergencias

Recientemente políticos y medios de comunicación de la prensa hegemónica, es decir, la prensa de izquierdas, han pegado el grito al cielo por la cantidad de «femicidios» acaecidos en el país en los últimos 8 meses. Hablan de “emergencia social” o de “epidemia” al referirse a ellos y sus tonos y calificativos invocan el alarmismo, la urgencia y el pánico.

Antes que nada, es importante resaltar: cada vida es sagrada y no hay vidas de primera y vidas de segunda ¿Estamos de acuerdo en esa premisa republicana que dice que todos somos iguales ante la ley porque todos poseemos la misma dignidad humana? Si usted responde que sí deberá explicar por qué una mujer que mata a su pareja varón puede recibir, máxime, hasta 25 años de condena; mientras que un hombre que mata a su pareja mujer puede recibir hasta 30 años de prisión ¿No éramos todos igualmente dignos?

Más allá del juicio analítico al cual arribe, usted deberá hacer números para saber cuál es la verdadera emergencia que existe en el país. Por ejemplo, se nos dice que este año, en lo que va del mismo, han sido asesinadas por su pareja 26 mujeres y que estos actos constituyen feminicidios. Eso último estará por verse cuando los juicios hayan concluido y haya dictamen cierto y sentencia firme al respecto, mientras tanto impera la ley: presunción de inocencia, debido proceso y derecho a la defensa. Impera la ley, ¿no? Entiendo que esta es una República o el Imperio de la ley, ¿no?

De todas maneras, fíjese en las siguientes estadísticas y dígame usted, amable lector, cuál es la epidemia que nos asola. Es verdad, muere una mujer en manos de su pareja aproximadamente cada dos o tres semanas, sin embargo, muere, por lo menos, una mujer al día en Paraguay por cáncer de cuello uterino, debido a detección tardía o porque no existen equipos de radioterapia en el INCAN en nuestro país. En el año 2022 murieron de manera prematura por cáncer de cuello uterino en Paraguay 392 mujeres ¡Si, 392 mujeres! En el año 2019 incluso la proporción era de 2 a 3 muertes de mujeres por día al respecto y nadie declaró “emergencia social”.

¿Cuál es la verdadera “emergencia”, señores de los medios de comunicación? ¿No es acaso una flagrante manifestación de violencia que el ente estatal estafe a mujeres pagadoras de impuestos al no acceder a radioterapia a través del sistema de salud? ¿Dónde están las feministas cuándo se les necesita? ¿O estas muertes no son rentables políticamente para el feminismo?

Bueno, pero no faltará quien me acuse de que en el caso de los feminicidios se tratan de muertes violentas. Bueno, según la misma política nacional existen 4 tipos de muertes violentas: suicidios, feminicidios, homicidios y accidentes de tránsito.

Se dirá que hasta ahora han muerto de manera violenta 26 mujeres a manos de sus parejas, sin embargo, si hablamos de emergencia ¿Quién declara “emergencia social” por la cantidad de suicidios que hay en el Paraguay? La mayoría son hombres, ¿sabía usted? Solo el pasado día jueves 31 de agosto, se registraron 8 suicidios en todo el país. Son 8 vidas ¿no eran todas las vidas igual de dignas? Un solo día de suicidios del 2023 representa un tercio de los «feminicidios».

El año 2020 cerró con un total de 514 casos consumados de suicidio; el 2021, 544 casos, y el 2022 con 576 casos. Es decir, se registra un franco ascenso, sin embargo, para las autoridades estos casos de muertes violentas, donde la mayoría son hombres, no cuenta lo suficiente para declarar “emergencia social”. En este caso también existe una tendencia firme de 1 suicidio por día, lo cual supera ampliamente 1 feminicidio cada dos o tres semanas. Sin embargo, se sospecha que no es rentable políticamente para atraer fondos enfocar la emergencia social en los casos de suicidio o de cáncer de cuello uterino: no hay periodistas escandalizados o marchas por los suicidas ni por las mujeres que mueren de cáncer.

Como la estupidez está repartida estadísticamente de forma normal no faltará el que se queje de por qué hacer esta digresión donde se comparan muertes de mujeres a manos de su pareja, muertes de mujeres por causa de cáncer de cuello uterino y muertes de personas que se quitan la vida. Desde un punto de vista moral principista toda vida es sagrada y cada muerte nos disminuye como sociedad. Ninguna vida vale más y, sin embargo, para la prensa hegemónica y los políticos pareciera que solo existen las muertes por feminicidio, a tal punto que son capaces de declarar estado de “emergencia social” por 26 asesinatos, mientras cada día mueren dos mujeres de cáncer por desidia estatal y política y mueren una o dos personas quitándose la vida.

¿Cuál es la verdadera emergencia social y cuáles son las muertes que son más rentables políticamente hablando? ¿Por qué la prensa hegemónica es cómplice de este relato donde se da más importancia a un tipo de muerte que a otras?

Y finalmente, ¿por qué con un proyecto de ley de emergencia social se destinará mayores partidas presupuestarias a intentar prevenir un fenómeno, el feminicidio, que representa un 7% de las muertes de mujeres por cáncer de cuello uterino? ¿Valen más las vidas de las mujeres asesinadas por su pareja que las mujeres que mueren de cáncer? A juzgar por el presupuesto, sí.

¿Se declarará “emergencia social” por los 576 casos de suicidios del año pasado que representan 21 veces más cantidad de muertes que los feminicidios? No creo, además el 70% son hombres y las mujeres que se suicidan parecen no estar en el radar de las feministas. Es muy posible que para los políticos haya muertes de primera y muertes de segunda. En todo caso, yo creo que la verdadera epidemia es otra, amable lector. La emergencia social que nos asola es la estupidez de una sociedad idiotizada que consume cualquier relato sin analizarlo. Va con onda.