lunes, 23 diciembre, 2024

Cuando la derecha juega a ser izquierda: Pierde dos veces

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Héctor Acuña
Héctor Acuña
Director Editorial de InformatePy

Recientemente se presentó un proyecto de ley que declara “Emergencia social ante la violencia contra las mujeres, las niñas y las adolescentes” ¿Qué significará emergencia social? No lo sé, pero tiendo a asumir que este tipo de declaraciones de emergencias exigen un uso más discrecional de los recursos que nos extraen a todos los contribuyentes. El tiempo dirá.

¿Pero qué sé hará al respecto de la “violencia” que viven las mujeres?

Bueno, el gobierno, a través de la coacción estatal “establecerá mecanismos urgentes de prevención para promover el cambio cultural

¿Y cómo se realizará el cambio cultural vía coacción estatal?

“A través de talleres y campañas de concientización (¡vaya Dios a saber qué significa eso!, hace dos décadas que trabajo en educación y aún nadie me lo ha sabido explicar) de igualdad de GÉNERO entre hombres y mujeres”.

A continuación, queridos lectores, pasaré a explicar el error estratégico de la ANR al abrazar el discurso de la izquierda radical, primero el error teórico, y segundo, el error político.

Errores teóricos

El proyecto de ley obliga a toda institución educativa (primaria, secundaria y terciaria), pública o de capital privado, a que realicen “talleres de igualdad de género” para lograr un pretendido estado idílico denominado “deconstrucción del machismo” durante 1 hora a la semana. Esta obligación (usted estará obligado a realizar los talleres en su institución educativa o a participar) surge de unos “supuestos análisis de casos de violencia ocurridos en el país”.

Mi problema es que, si el diagnóstico es VIOLENCIA entonces el concepto que usan para erradicarla, GÉNERO, es contraproducente ¿Ignora el grupo de legisladores que el concepto “GÉNERO” surge de una visión conflictiva de la realidad social? ¿No saben que los ideólogos del género han enfatizado que el género es “una construcción social impuesta desde el poder político”? Simone de Beauvoir, Michel Foucault, Kate Millet, Shulamit Firestone, Judith Butler, todos ideólogos del género coincidían, con matices, en esa definición, entonces, ¿cómo pretenden traer la pretendida paz social con un concepto tan conflictivo sobre la relación entre los sexos?

Si tienen acaso buenas intenciones terminarán por darse cuenta que este concepto y la visión sociológica trasnochada y conflictiva que le fundamenta alienta y estimula una deseada “guerra entre los sexos” desde sus promotores ideológicos de izquierda. Este proyecto solo tira nafta sobre el fuego que, supuestamente, pretenden apagar.

  • El proyecto de ley habla de “DECONSTRUCCIÓN DEL MACHISMO” ¿Saben de dónde proviene ese lenguaje? ¿Por qué se habla de “de-construir”? El ESTRUCTURALISMO y el post-estructuralismo ven la realidad (esto es su metafísica o teoría de la realidad) como si esta fuera una pared hecha de ladrillos, donde cada uno es constitutivo de la pared de una forma de argamasa inflexible y rígida. Es por eso que sus militantes dicen sus mantras como “la violencia es estructural”, “la pobreza es estructural” ¿qué rayos se pretende decir con eso? ¿lo han pensado? Es sencillo. Si la realidad es como una estructura, una pared de ladrillos, y si hay características que son “ESTRUCTURALES” (como una varilla que atraviesa la pared), entonces, ¿cuál es la única forma de realizar un cambio social? Si, la única forma de cambiar la sociedad es tumbarla, es destruirla desde sus cimientos, esto es, por medio de la VIOLENCIA. Lo mismo se aplica a la deconstrucción del machismo en los hombres, ya que se considera que los hombres son “una construcción social”, ¿cómo de-construirlos? Sométanlos a talleres y campañas, tipo “campos de concentración”, donde estos jovencitos serán ridiculizados, escrachados, se les dirá que todo en ellos está MAL, que son malvados por naturaleza, que son potenciales violadores y asesinos y donde serán señalados como lo peor de la sociedad. Todo esto se hará con el ropaje de las buenas maneras educativas, con cinismo e hipocresía, pero el mensaje quedará claro, como queda en este proyecto.

¿Pueden con este concepto de realidad y de persona humana (constructivismo cultural) reducir la VIOLENCIA a la cual apelan para declarar EMERGENCIAL SOCIAL? No, no pueden, porque este concepto de la naturaleza humana y de la realidad es un concepto errado, que además solo admite el cambio por medio de la VIOLENCIA.

  • Como si fuera poco, la ley obliga vía coacción estatal, a que “todos los medios de comunicación social” (¡vaya usted a saber a qué se refieren, pero parece que a la tv!) “dediquen al menos 30 segundos” del prime time (horario central) a “la promoción de la igualdad de género entre hombres y mujeres, promoviendo el cambio de actitud y prácticas de igualdad”.

Usted dirá que es una tontería 30 segundos, pero si lo hace usted es un estúpido que no sabe cuánto cuesta 1 segundo en televisión ¿quién pagará ese espacio “publicitario” impuesto desde el poder político? Me temo que usted y yo. No existe espacio de tv gratis.

Pero es aún más, preocupante, porque en este caso, surge la misma atrocidad que con el caso de las escuelas, colegios o universidad de capital privado, ¿cómo puede el poder político imponer la ideología de GÉNERO de forma obligatoria? ¿Lo puede hacer declarando EMERGENCIA SOCIAL? ¿Por qué y por qué entonces usar conceptos probadamente elaborados desde una visión violenta y conflictiva de las relaciones humanas? ¿Por qué no buscar otro marco teórico?

Errores políticos

  1. La ANR divide su base. Hay muchos colorados que están en contra del uso de la palabra GÉNERO en las políticas públicas.
  2. Amigos de la ANR, ¡Esperanza Martínez les firmó el proyecto!, ¿en serio cómo rayos no pensaron que algo estaba terriblemente mal en él? Vamos na, es una de las políticas de la izquierda radical.
  3. Les cuento que no se congraciaron con la gente de izquierda, que les considera hipócritas; y quemaron con parte de su electorado de la derecha, los conservadores y patriotas. Es decir, perdieron en ambos lados del espectro político.
  4. “No se ganan batallas con armas ajenas” ¿Creen que pueden ganar la batalla política usando los conceptos que deliberadamente elaboraron ideólogos de izquierda? Lean a Maquiavelo o se los van a llevar puestos los de la izquierda radical.
  5. Se nota la orfandad de ideas de la ANR que no sabe cómo abordar los problemas sociales sin recurrir al diccionario progresista. Urgente búsquense un ideólogo. Mi propuesta es el Dr. Fernando Griffith. De nada. Consejo gratis.

Conclusión

Las ideas y conceptos no flotan en la nada, sino que han sido elaborados premeditadamente por ideólogos para lograr objetivos políticos puntuales. Cada vez que ustedes, la ANR, use conceptos de la izquierda para sus leyes, proyectos sociales y políticas públicas, ustedes estarán avanzando un programa político progresista. La poca derecha política de la ANR debe urgentemente reconocer su orfandad ideológica y buscar apoyo al respeto. No todo se logra con burócratas, técnicos o políticos: falta el ideólogo.

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