Por primera vez una misión de la Organización de Estados Americanos (OEA) fue tan crítica con un proceso electoral boliviano. Anoche, el jefe de la delegación, el excanciller de Costa Rica, Manuel González, manifestó su sorpresa y preocupación por el drástico cambio en los resultados de las elecciones presidenciales y puso también el ojo en el excesivo uso de bienes del Estado en la campaña del oficialismo.
Mientras en la avenida Arce de La Paz se generaba tensión porque la Policía tuvo que ponerse al medio de simpatizantes del MAS y de Comunidad Ciudadana (CC) para evitar que se enfrenten, en la zona sur de la ciudad, el jefe de la misión de la OEA ofreció una conferencia de prensa para emitir este contundente informe preliminar. González comenzó por un llamado a que se respete la voluntad popular.
“Este proceso electoral se ha dado en condiciones muy complejas. La Misión de Observación Electoral de la OEA ha testificado la inequidad evidente entre las candidaturas. Ha sido notorio el uso de recursos públicos durante la campaña”. Sin mencionarlo específicamente, el dardo fue lanzado al oficialismo.
Pese a que destacó la masiva y ordenada participación de la ciudadanía en el acto electoral, inmediatamente después lanzó la crítica más contundente.
“La misión de la OEA manifiesta su profunda preocupación y sorpresa por el cambio drástico y difícil de justificar en la tendencia de los resultados preliminares conocidos tras el cierre de las urnas”.
Subrayó que a las 19:40 del domingo el TSE difundió los resultados del TREP y esas cifras indicaban “claramente una segunda vuelta, tendencia que coincidía con el único conteo rápido autorizado y con el ejercicio estadístico de la misión”.
Reiteró la sorpresa porque a las 20:10 del domingo dejaron de divulgar los resultados “por decisión del pleno… 24 horas después, el TSE presentó datos con un cambio inexplicable de tendencia que modifica drásticamente el destino de la elección y genera pérdida de confianza en el proceso electoral”.
Además, instó a la autoridad electoral a que defienda la voluntad de la ciudadanía boliviana “con estricto apego a la Constitución y sus leyes complementarias de manera ágil y transparente” y declaró “de extrema importancia que se mantenga la calma y se evite la violencia” en el país. Brasil, Argentina y Estados Unidos, emitieron comunicados con un mismo mensaje: preocupación por la paralización del TREP y una conminatoria a la transparencia. Itamaraty, la cancillería brasile- ña fue más allá, porque anoche comentó en Twitter: “Brasil coincide con las preocupaciones expresadas por la OEA sobre la elección de Bolivia.
Debemos respetar el voto del pueblo boliviano y su voluntad soberana.
Por primera vez una misión de la Organización de Estados Americanos (OEA) fue tan crítica con un proceso electoral boliviano. Anoche, el jefe de la delegación, el excanciller de Costa Rica, Manuel González, manifestó su sorpresa y preocupación por el drástico cambio en los resultados de las elecciones presidenciales y puso también el ojo en el excesivo uso de bienes del Estado en la campaña del oficialismo.
Mientras en la avenida Arce de La Paz se generaba tensión porque la Policía tuvo que ponerse al medio de simpatizantes del MAS y de Comunidad Ciudadana (CC) para evitar que se enfrenten, en la zona sur de la ciudad, el jefe de la misión de la OEA ofreció una conferencia de prensa para emitir este contundente informe preliminar. González comenzó por un llamado a que se respete la voluntad popular.
“Este proceso electoral se ha dado en condiciones muy complejas. La Misión de Observación Electoral de la OEA ha testificado la inequidad evidente entre las candidaturas. Ha sido notorio el uso de recursos públicos durante la campaña”. Sin mencionarlo específicamente, el dardo fue lanzado al oficialismo.
Pese a que destacó la masiva y ordenada participación de la ciudadanía en el acto electoral, inmediatamente después lanzó la crítica más contundente.
“La misión de la OEA manifiesta su profunda preocupación y sorpresa por el cambio drástico y difícil de justificar en la tendencia de los resultados preliminares conocidos tras el cierre de las urnas”.
Subrayó que a las 19:40 del domingo el TSE difundió los resultados del TREP y esas cifras indicaban “claramente una segunda vuelta, tendencia que coincidía con el único conteo rápido autorizado y con el ejercicio estadístico de la misión”.
Reiteró la sorpresa porque a las 20:10 del domingo dejaron de divulgar los resultados “por decisión del pleno… 24 horas después, el TSE presentó datos con un cambio inexplicable de tendencia que modifica drásticamente el destino de la elección y genera pérdida de confianza en el proceso electoral”.
Además, instó a la autoridad electoral a que defienda la voluntad de la ciudadanía boliviana “con estricto apego a la Constitución y sus leyes complementarias de manera ágil y transparente” y declaró “de extrema importancia que se mantenga la calma y se evite la violencia” en el país. Brasil, Argentina y Estados Unidos, emitieron comunicados con un mismo mensaje: preocupación por la paralización del TREP y una conminatoria a la transparencia. Itamaraty, la cancillería brasile- ña fue más allá, porque anoche comentó en Twitter: “Brasil coincide con las preocupaciones expresadas por la OEA sobre la elección de Bolivia.
Debemos respetar el voto del pueblo boliviano y su voluntad soberana.
Brasil es inquebrantable en su defensa de la democracia en toda la región”. Los embajadores de la Unión Europea (UE) se reunieron con el canciller Diego Pary y le manifestaron su inquietud en contra del Órgano Electoral. Por la mañana, el canciller invitó a los diplomáticos a seguir el recuento de los votos y garantizó la transparencia del proceso.
El domingo, la presidenta del ente electoral, María Eugenia Choque, explicó que se suspendió la proyección de los datos porque habían iniciado el recuento oficial y buscaban evitar que se cruce la información. Hace dos semanas, la empresa Neotec, encargada del TREP, explicó que la transmisión rápida funcionaba con un software absolutamente independiente.
González reveló ayer que la Sala Plena explicó que se dio “un presunto ataque o inestabilidad en el sistema, pero también confirmó que no fue vulnerado. Pero como se había presentado una situación irregular, ante la intervención de datos, decidieron suspender la transmisión”.