El presidente de Francia Emmanuel Macron enfrenta una deslegitimación popular desde la aprobación por decreto de la polémica reforma jubilatoria que desmadró las calles con pobladas autoconvocadas.
Ahora, con el recibimiento en el Palacio de Eliseo de un dedo humano amputado por correo atemorizó a los actuales dirigentes en este clima político inestable. La Policía investiga el hecho como un mensaje mafioso, una falta o una amenaza directa al líder francés.
El servicio de correspondencia de la residencia presidencial Eliseo recibió una carta que contenía la yema de un dedo, según fue revelado por la agencia de noticias francesa lesValeurs Valeurs Actuelles.
“El dedo estaba metido en una nevera donde la policía ponía sus tazones”, aseguro una fuente confidencial al medio galo.
El Servicio de Correspondencia Presidencial (SCP), reconoce que, a lo largo de la historia democrática francesa, ha recibido toda clase de cartas extravagantes, pero jamás algo tan siniestro como un dedo humano.