La Cámara de Senadores debe aprobar el Presupuesto General de la Nación (PGN) 2026 y tiene la opción de acompañar el proyecto del Poder Ejecutivo, que recorta recursos para inversión a 570 millones de dólares, cuando se requieren más de 900 millones o ampliarlo para evitar la paralización de obras de infraestructura.
En las condiciones actuales se agravará la de por sí difícil situación financiera que enfrentan las empresas del sector de la construcción, que reclaman pagos atrasados por más de 200 millones de dólares e intereses por obras más antiguas que ascienden a más de 100 millones de dólares.
Si el presupuesto se aprueba como está en el proyecto del Poder Ejecutivo, y si se debe pagar del mismo las deudas de más de 200 millones de dólares y los intereses, quedará sólo un poco más de 200 millones de dólares para pagar por las obras en proceso de ejecución, razón por la cual se requiere de más recursos y evitar la
ralentización o paralización, que traerá aparejada reducción de personal o desempleo.
A modo de ejemplo, y para graficar la real situación hemos tomado dos casos que registran fuertes recortes en el presupuesto para el próximo año, y son casos emblemáticos de mucha importancia para el desarrollo del área de influencia.
En estas 2 obras para el 2026, el MOPC tiene déficit de recursos de USD 182 millones y son: el Corredor Bioceánico, una obra encarada por el MOPC que costará 2.208.820.108.338 guaraníes. Para el 2026 se deberá pagar 1.320.000.000.000 y el MOPC presupuestó sólo G. 485.000 millones. Para la Ruta Pilar – Paso de Patria se requieren 446.000 millones de guaraníes y se previó sólo 5.000 millones de guaraníes.
En estas condiciones será sumamente difícil que las obras tengan una normal ejecución y traerá como consecuencia extender el plazo de ejecución. Es decir, en vez de culminar en un año, podría extenderse hasta 3 o 4 años.




