Pescadores artesanales en Chile han denunciado recientemente la incursión de una flota china ilegal que estaría depredando el mar territorial del país. Esta situación no es un caso aislado, sino una práctica habitual de la flota pesquera china en diversas regiones de América Latina, como Argentina y Ecuador, donde la pesca ilegal y la explotación de recursos marinos se han convertido en una constante amenaza.
En Argentina, la presencia de barcos pesqueros chinos en la Zona Económica Exclusiva (ZEE) ha generado preocupación durante años. En 2016, un incidente emblemático ocurrió cuando la Prefectura Naval Argentina hundió al arrastrero Lu Yan Yuan Yu 010, de bandera china, tras detectar que estaba pescando ilegalmente en aguas argentinas. Este evento evidenció las tácticas evasivas de los pesqueros chinos, que a menudo apagan sus transpondedores para ingresar clandestinamente a las aguas argentinas. Desde 2010, la Armada argentina ha expulsado al menos a 11 calamareros chinos por presunta pesca ilegal.
Además, un estudio reciente reveló que las horas de pesca de la flota china en el límite del mar argentino han incrementado en un 800% en la última década, lo que representa una amenaza creciente para los recursos pesqueros y el equilibrio ecológico de la región.
En Ecuador, la situación no es menos alarmante. Las islas Galápagos, reconocidas por su biodiversidad única, han sido objeto de incursiones por parte de embarcaciones pesqueras chinas. A pesar de los esfuerzos por proteger estas aguas, la falta de acuerdos internacionales efectivos ha permitido que la pesca ilegal continúe, poniendo en riesgo la conservación de este patrimonio natural.
Recientemente, pescadores artesanales en Chile han denunciado la presencia de una flota de bandera china, que estaría operando ilegalmente dentro de las aguas nacionales, específicamente en la Zona Económica Exclusiva (ZEE) de 200 millas. Según los denunciantes, alrededor de 166 embarcaciones estarían extrayendo jibia, un molusco clave para la economía local, afectando gravemente a los recursos pesqueros.
En respuesta a estas denuncias, la Armada de Chile y el Servicio Nacional de Pesca y Acuicultura (Sernapesca) han iniciado operativos de fiscalización frente a las costas del norte del país, especialmente en la zona de Iquique, donde se ha identificado la presencia de cerca de 50 embarcaciones extranjeras. Estos operativos buscan verificar las condiciones de pesca y asegurar el cumplimiento de las normativas vigentes.
La pesca ilegal por parte de embarcaciones chinas en aguas de América Latina representa una amenaza constante para los recursos marinos y la economía local de los países afectados. Es imperativo que los gobiernos de la región fortalezcan sus políticas de control y protección de sus Zonas Económicas Exclusivas, implementen acuerdos internacionales más estrictos y colaboren en la vigilancia y sanción de estas prácticas ilegales para salvaguardar la biodiversidad marina y los medios de vida de las comunidades pesqueras locales.