El empate 1-1 entre Olimpia y Sportivo Trinidense en el Defensores del Chaco fue otro capítulo de frustración para un club que parece empeñado en no despegar y cada día que pasa, es más un circo de errores que acelera su caída en la tabla.
Olimpia se adelantó a los 4 minutos gracias a Rodney Redes, quien aprovechó un pase profundo de Héctor David Martínez para que Iván Leguizamón centrara rasante; la pelota fue desviada por Carlos Sebastián Ferreira y Redes solo tuvo que empujarla al fondo.
Pero la ventaja duró poco, a los 15 minutos Trinidense igualó desde los doce pasos. En un córner de Néstor Camacho la pelota dio en la mano de Ferreira y el árbitro sancionó penal; Camacho definió con categoría al costado opuesto.
Más allá de los nombres, lo alarmante fue la ausencia de reacción colectiva. Olimpia fue previsible, lento en el traslado, sin conexión clara entre mediocampo y ataque y con demasiadas imprecisiones en el área rival. La defensa mostró desorden en las segundas jugadas y la presión fue inexistente.
El empate profundiza la sensación de estancamiento. El “equipo” decano acumula ya varios partidos sin victorias y no encuentra remedio a su declive. La hinchada se fue con más preguntas que certezas. La paciencia de la gente se está agotando y exige respuestas.