Luego de un frente de chaparrones, el inicio de semana contó con lluvias que ayudaron al campo, con reportes de entre 10 a 50 mm en distintas zonas productivas. Esto ayudó a la germinación y desarrollo de los cultivos zafriña en suelo y permite concluir la siembra en zonas con mayor estrés hídrico.
Flaminio Núñez, productor agrícola en la zona de Raúl Arsenio Oviedo (Caaguazú), indicó que el martes recibieron cerca de 40 mm de agua y con esto esperan culminar la siembra en las áreas restantes.
Desde Alto Paraná, Aurio Frighetto, comentó que les llegó una “linda lluvia” de 35 mm aproximadamente y los cultivos de maíz y sorgo muestran un buen desarrollo, de momento.
Pronóstico de precipitación acumulada
De acuerdo con las actualizaciones más recientes de los modelos climáticos del Instituto de Biotecnología Agrícola (INBIO), durante el mes de marzo, los acumulados de precipitación se mantendrían por debajo de los valores normales.
Esta proyección indica una tendencia más probable de lluvias irregulares, lo que podría intensificar las condiciones de estrés hídrico en los cultivos de zafriña.
El impacto sería más importante en zonas donde los suelos presentan una textura predominantemente arenosa, debido a su limitada capacidad de retención de humedad. En estas áreas, la reducción en la disponibilidad de agua en el perfil del suelo podría afectar el desarrollo fenológico de los cultivos, incrementando el riesgo de pérdidas en el rendimiento, según el instituto
UGP