El presidente electo Donald Trump lanzó una contundente advertencia contra Hamás, reiterando que “se desatará el infierno” si los rehenes aún cautivos en Gaza no son liberados antes de su toma de posesión, programada para el 20 de enero.
Este martes, desde su residencia en Mar-a-Lago, Florida, Trump, acompañado por Steve Witkoff, nombrado por él como enviado especial para Medio Oriente, dejó claro que no permitirá que Hamás siga reteniendo a los rehenes. «Si esos rehenes no regresan… para cuando asuma el cargo, se desatará el infierno en Medio Oriente”, advirtió Trump. Aunque no especificó las acciones que tomará su administración, destacó que, por el momento, no tiene la intención de revelar más detalles. “No quiero perjudicar la negociación”, añadió.
Se estima que el grupo terrorista mantiene cautivos a 96 individuos, de los cuales solo 50 seguirían con vida, incluidos tres ciudadanos estadounidenses.