La Unión Europea ha mostrado este martes división respecto a la posibilidad de permitir a Ucrania usar armas occidentales para atacar a Rusia en su propio territorio, así como para extender la misión de entrenamiento europea a soldados ucranianos a la propia Ucrania.
En una rueda de prensa posterior a la reunión de los ministros de Defensa de la Unión Europea, el Alto Representante para Política Exterior de ese organismo, Josep Borrell, señaló que existe un debate en el seno del bloque entre los Estados que se oponen y los que están a favor de levantar las restricciones europeas al uso de su armamento por parte de Ucrania en territorio ruso.
Borrell, que se encuentra entre quienes se muestran a favor de permitir a Ucrania golpear en territorio ruso, afirma que las tropas de Zelensky se encuentran en desventaja por las limitaciones en el uso del armamento europeo.
Ante la inquietud de quienes no están a favor y temen que esa acción habilite a Rusia a atacar objetivos por todo el bloque europeo, Borrel respondió que «En la vida hay que tomar decisiones».
Mientras que Italia, Alemania y Estados Unidos (miembro de la OTAN) rechazan este escenario, países como Lituania, Estonia y los Países Bajos piden retirar las limitaciones a las fuerzas armadas ucranianas.