Cuba se convirtió este viernes en el segundo país de América Latina y el Caribe que abrió el camino a la eutanasia, después de Colombia, luego de que la Asamblea Nacional diera luz verde a modificaciones en los legisladores que permitirán llegar, luego de la reglamentación, a la posibilidad de los ciudadanos de pedir una muerte digna o suicidio asistido.
La nueva legislación forma parte de la aprobación de una nueva ley de Salud Pública que actualiza el marco legal del país para su sistema de atención médica universal y gratuita.
«Se reconoce el derecho de las personas a acceder a una muerte digna, mediante el ejercicio de las determinaciones para el final de la vida, que pueden incluir la limitación del esfuerzo terapéutico, los cuidados continuos o paliativos y los procederes válidos que finalicen la vida», dice el texto final de la legislación.
Este procedimiento estará dirigido «a personas con enfermedades crónicas degenerativas e irreversibles, con un sufrimiento intratable, que se encuentren en fase agónica o terminal de vida o que hayan sufrido lesiones que los coloquen en esta condición».
«La aplicación de procederes válidos que finalicen con la vida de una persona» será «regulada en una Ley específica para ese tema», que deberá proponer el Ministerio de Salud cuando estén «creadas las condiciones» en el país, añade la ley.
Suiza, Países Bajos, Luxemburgo, Canadá, Australia, España, Alemania, Nueva Zelanda y algunos estados de Estados Unidos son lugares que permiten la eutanasia.