Desde que el gobierno de coalición del canciller Olaf Scholz ha sido sometido a una creciente presión interna en las últimas semanas para que adopte una línea más firme contra el islamismo en Alemania, las investigaciones de los grupos musulmanes extremistas en Alemania no han parado de aumentar.
Cabe recordar el sentimiento de responsabilidad histórica de muchos alemanes hacia Israel en expiación por los horrores del nazismo.
Este jueves (16/11) la policía y las agencias de inteligencia desplegaron una gran operación con masivas redadas en 7 estados federados en 52 propiedades de organizaciones islamistas con presuntos vínculos con Hezbollah (prohibida por Alemania oficialmente como organización terrorista en abril de 2020) e Irán.
Los 800 agentes de seguridad que participaron en operativo confiscaron material que, según dijeron, será investigado por sedición y delitos conexos relacionados con el terrorismo.
Según pudo saber Financial Times, allanaron el jueves 54 propiedades de “organizaciones antiisraelíes”.
El principal objetivo, según la ministra del Interior de Alemania, Nancy Faeser, es el Centro Islámico de Hamburgo (IZH), una de las organizaciones musulmanas más grandes y antiguas del país, por sus conexiones con Irán y el grupo paramilitar libanés Hezbolá.