Un documento al que tuvo acceso The Intercept muestra que los Protective Services de las Fuerzas Armadas están creando listas negras de las personas que critican a los altos mandos del Ejército.
El pasado 17 de junio, el medio The Intercept publicó un largo artículo revelando el trabajo poco convencional y probablemente inconstitucional que está llevando a cabo el U.S. Army Protective Services Battalion (Batallón de Servicios de Protección del Ejército de EE.UU.) en redes sociales.
Este “batallón” vendría a ser como el Servicio Secreto de la Casa Blanca, pero encargada de salvaguardar a los altos mandos militares, principalmente, a los Generales del Estado Mayor Conjunto, de ataques como “intentos de asesinatos, secuestros, lesiones o vergüenza“, según los registros del Ejército.
Y es esta última palabra, “vergüenza“, que el Jefe del Estado Mayor Conjunto, el militar de más alto rango de las Fuerzas Armadas de los Estados Unidos, el general Mark Milley, ha tomado como puntapié para crear una división interna en los Protective Services que se encargue de monitorear las redes sociales.
Según el artículo publicado que se basa en una serie de documentos que fueron recientemente desclasificados, el mandato de los Servicios de Protección se ha ampliado desde la asunción de Biden para incluir el monitoreo de las redes sociales en busca de amenazas “directas, indirectas y veladas” y la identificación de “sentimientos negativos” con respecto a los generales de más alto rango.
La maquinaria de seguridad nacional de Estados Unidos se ha centrado cada vez más en las redes sociales, particularmente en lo que se refiere a la “desinformación” y supuestas “noticias falsas“. Varias agencias de seguridad nacional han pasado los últimos años instalando oficinas en todo el gobierno federal para contrarrestar la supuesta amenaza.
El artículo revela que los militares estadounidenses están llevando a cabo operaciones de vigilancia sobre las personas que identifican habiendo publicado críticas contra los altos mandos en Twitter, Facebook, Instagram, TikTok y otros foros como Reddit o 4Chan, y poniéndolos en listas negras.
“Anotan su nombre, su apellido, su ubicación exacta. Lo mismo hacen para sus familiares. Les crean a todos un perfil de su posible ideología, y empiezan a mirarlos con más frecuencia“, dijo Ilia Siatitsa, directora de la organización Privacy International. “Por ahora no tenemos registro de que hayan actuado en base a los monitoreos, pero sin lugar a duda están creando listas negras de usuarios en Internet“.
El documento de adquisición, publicado en forma redactada después de un pedido de información, las Fuerzas Armadas explican la necesidad de “mitigar las amenazas en línea“, así como “identificar sentimientos positivos o negativos” sobre altos funcionarios del Pentágono.
El documento asegura que accedieron a los servidores internos de Twitter con ayuda de una empresa privada contratada por el Pentágono, Dataminr, que ya había trabajado con la Casa Blanca en el pasado, para obtener los datos personales de las cuentas que estaba monitoreando. Hicieron lo mismo pero a menor escala en Facebook, 4Chan, Reddit, YouTube y Vkontakte, una imitación de Facebook popular en Rusia.
Las plataformas de chat de Internet como Discord y Telegram también se examinarán con el propósito de “identificar la lucha contra el terrorismo, el extremismo y la radicalización”, aunque no está claro qué significan exactamente esos términos aquí.
Un informe recientemente desclasificado de la Oficina del Director de Inteligencia Nacional (DNI) describe los esfuerzos de vigilancia dramáticos e invasivos que realizados por el gobierno de Estados Unidos desde la llegada al poder de Biden a través de la compra de datos recopilados en el sector privado. A través de contratos con entidades privadas, el gobierno ha eludido las leyes que consagran el debido proceso, permitiendo que las agencias federales recopilen datos celulares de millones de estadounidenses sin órdenes judiciales ni supervisión judicial.
Si bien el documento de adquisición no menciona un producto específico, sí muestra que el contrato se adjudicó a SEWP Solutions, parte de LLC. SEWP, un proveedor de software federal que ha vendido repetidamente al Departamento de Defensa un conjunto de herramientas de vigilancia que se asemeja mucho a lo que están usando los Protective Services del Ejército.
Esta herramienta, comercializada bajo el extraño nombre de Berber Hunter Tool Kit, es una colección de herramientas de vigilancia de diferentes empresas agrupadas por ECS Federal, un importante proveedor de software federal vinculado al gigante Google. ECS y otros tres contratistas federales son propietarios conjuntos de SEWP, que revende Berber Hunter.
Con información de la Derecha Diario