El pasado miércoles 25 de enero, un grupo de 18 republicanos de la Cámara de Representantes del Congreso de los Estados Unidos presentó una nueva resolución en la que se le exige a la Casa Blanca que reconozca a Taiwán como un estado soberano e independiente y que reanude los lazos diplomáticos formales.
Encabezados por el republicano Tom Tiffany, de Wisconsin, se busca además que la resolución lleve al gobierno norteamericano a establecer un acuerdo de libre comercio con el gobierno taiwanés, con sede en Taipéi.
De esta manera, los republicanos presionan a Biden para dar un apoyo claro y conciso a Taiwán, que está al borde de la invasión por parte de las fuerzas del Partido Comunista Chino.
Todo indica que la resolución será aprobada, debido a que tras el triunfo en las elecciones de noviembre, los republicanos dominan la Cámara de Representantes. Sin embargo, sin el apoyo del Senado esto solo podría hacerse en forma Resolución de la Cámara en lugar de un proyecto de ley, y no es vinculante.
La medida solo reflejaría el sentimiento del 118º Congreso de los EE.UU. y una recomendación política para la administración Biden, pero el mandatario demócrata no estaría obligado a hacerlo. De todos modos, el impacto simbólico igualmente sería muy fuerte.