No podría ser en otro lugar, solo en Bolaguay, donde nada es lo que se dice si no lo que se repite nomás. Como la otrora muy utilizada oración: «Lo que dice el demonio repite el mono». Eso somos, unos monos que repetimos nomás lo que dice el demonio. ¿Y qué dice el demonio? Todo lo que decimos nosotros.
Juan Bautista Alberdi, por su parte, dijo que las instituciones viven en el hombre y no en la letra. El finado Argaña decía lo contrario, los hombres pasan y las instituciones quedan. Sucede que si la radio no tiene locutores o no emite música, está ahí al pedo, como si no existiera.
Nadie va a ver la radio para oírla, la gente quiere escucharla de donde esté, para eso se inventó. Entonces Alberdi tuvo razón y no Argaña.
Ahora bien, ¿Por qué un liberal de lo más brillante que tuvo el continente americano es tan conocido en Paraguay? Solo de nombre, obviamente, porque su doctrina no aparece por ningún lado y menos donde debió ser su porta estandarte: en el Partido Liberal. Bien decía Franz Kafka; «Un idiota es un idiota, mil idiotas son mil idiotas y diez mil idiotas son un partído político». Sin ninguna duda y más que cualquier otro partido político en el mundo esto coincide con el Partido Liberal paraguayo, el partido de los idiotas, Carlos Portillo sería el presidente más representativo de dicha organización de hombres libres de inteligencia.
No hay una pizca, una gota de liberalismo en este partido paraguayo, el cual, desde 1978 se hace llamar radical y auténtico, no tiene nada de radical si no lo opuesto, tibio, se adecua hasta de segundo y menos aún auténtico, todo lo contrario, totalmente inauténtico, no tiene sentido. Se puede leer lo que dice el acta fundacional del 10 de julio de 1887 en Villarrica bajo el nombre de Centro democrático y luego su refundación en el año 1978 por Domingo Laíno quien lo rebautizó con el nombre de Partido Liberal Radical Auténtico. Pero esto es la letra, la cual, nada tiene que ver con sus afiliados actuales que de liberales no tienen ni el aspecto.
Solo recordar lo que dijo su actual presidente y nuevamente candidato a la presidencia de la república en vísperas de las pasadas elecciones del 2018: «Nosotros somos zurdos también». No sé cómo no le cayó el techo encima. ¡Un crash total! ¡Un estupefaciento! Son un desastre como Marito. El PLRA es una grosería.
Si buscas su definición ideológica en la red, vas a encontrar lo siguiente: Socioliberalismo, Progresismo, Liberalismo, Radicalismo. Posición: centro derecha. Esto es cualquier cosa, es que son cualquier cosa, basta mirarle a Celeste Amarilla, la liberal que hizo fato con el Estado, es como acostarse con el enemigo a pesar de haber declarado que desde que enviudó se volvió casta. O le pidió consejo a la hija de la Menchaca, bien liberal en lo sexual especialmente en lo que atañe al onanismo, algo muy notorio en el «liberalismo» paraguayo.
El liberalismo auténtico no tiene arraigo en Paraguay como tampoco la democracia, no tenemos la savia para lo uno ni lo otro. Lo que hay es una joda, una farsa, una comedia de mal gusto, pretendemos ser lo que no somos, vivir como si fuésemos, lo único auténtico aquí es que todos son unos bolas, por ello, si algo tuviésemos de auténticos deberíamos adecuar el nombre de nuestra república para que nos identifique: Bolaguay.
Para volver a ser una verdadera república como en la época de Stroessner debemos independizarnos de la mentira en la cual vivimos, al menos políticamente, de otra manera no encontraremos el camino, siempre estaremos errando. Se cuenta por ahí que uno de los afiliados tradicionales dijo por su partido: «Estábamos mejor contra Stroessner». Claro, antes eran «opositores a la «Dictadura», luego que cayó hubo que reinventarse, ser liberales o no ser como no lo son hasta hoy.
Para que haya liberalismo deben existir liberales y para que tengamos democracia debe haber menos católicos, no estoy diciendo que nos volvamos todos liberales y protestantes, si no dejar de mentirnos, quitar las mentiras de la misma constitución, eliminar cada institución que es una mentira en sí y asumir lo que somos, una república de mentirosos. En pecado por supuesto.
«La mentira política se instaló en nuestros pueblos casi constitucionalmente. El daño moral ha sido incalculable y alcanza a zonas muy profundas de nuestro ser. Nos movemos en la mentira con naturalidad. Durante más de cien años hemos sufrido regímenes de fuerza, al servicio de las oligarquías feudales, pero que utilizan el lenguaje de la libertad. Esta situación se ha prolongado hasta nuestros días. De ahí que la lucha contra la mentira oficial y constitucional sea el primer paso de toda tentativa seria de reforma». Octavio Paz
Hay 22 países en el medio oriente a los cuales se los identifica como árabes por el idioma en común (el árabe) además la religión musulmana, solo Irán no se considera árabe porque hablan oficialmente el persa o el farsi. Por su parte América Latina es un conjunto de 20 países en los que se habla español principalmente, así como el portugués y el francés que son lenguas de origen latino también. La religión mayoritaria en todos ellos es la católica, desde el Río Bravo hasta el estrecho de Magallanes.
Así y todo, estoy convencido que Domingo Laíno ganó la presidencia en 1993 y que a Argaña le robaron las internas a fines del 92 y a Oviedo la presidencia en el 98. Lilo, Lino y Laíno debieron ser presidentes del Paraguay cada uno en su tiempo, hubieran tenido legitimidad. Son tres presidentes que no tuvimos, solo vive Laíno, los otros dos fallecieron trágicamente. Pero la tragedia de Laíno es que siendo fundador del PLRA es guevarista, incluso castrista. Blas Llano, otro eterno presidente del PLRA es de ideología sandinista, no es broma, y la esposa del primero admira a los jesuitas que fueron siempre más comunistas que los propios marxistas. Y el actual, como vimos, está en una crisis existencial.
Dejemos de llamar a lo que no es como si fuese, en este caso liberales a los del PLRA, y a lo que es por lo que no es. El PLRA es un hato de idiotas y no un partido liberal.
«¡Ay de los que a lo malo dicen bueno, y a lo bueno malo; que hacen de la luz tinieblas, y de las tinieblas luz; que ponen lo amargo por dulce, y lo dulce por amargo!» Isaías 5:20
Este artículo se debe a la polka 18 de octubre.
Chau