Kencho Rodríguez, quien supo calificar de «desbocado» a Payo Cubas cuando el ex senador dijo que Rodríguez era el «cafisho» de Lugo, se desbocó… una vez más.
En esta ocasión, me atrevo a decir que pasa a un segundo plano el hecho que el senador esté apoyando la violación de las leyes de la Nación al darle apoyo a invasores de tierras en el distrito de Yrakyry del departamento de Alto Paraná.
Esta vez, con una actitud cobarde, condenable desde distintos puntos de vista, pero sobre todo, desde el punto de vista de cualquier hombre de bien; desafió a una abogada mientras le tocaba la cara (para demostrar que puede hacer lo que él quiera) y le decía: «Vos pío creés que te tengo miedo, pelotuda», como única respuesta a las palabras de la abogada Michelle Bettancourt, quien le había reclamado educadamente. «No me respetaste».
Permítanme insistir con esto, pero el conflicto de tierras, en este caso, pasa a segundo plano; lo que prima es la actitud de un senador cobarde, pendango, poco hombre al que espero que, más temprano que tarde, un hombre de ley ubique en tiempo y espacio.