El régimen comunista de Corea del Norte pidió a su población que “reduzca la cantidad que come”, al menos, hasta 2025 para hacer frente una severa crisis económica.
Los más de 25,7 millones de norcoreanos están sufriendo niveles de hambre como pocas veces han padecido debido a la escasez de comida, relacionada con la pandemia del coronavirus y las políticas económicas que se destinan más al desarrollo armamentístico que a la vida doméstica.
La pandemia ha rematado una sociedad que ya era extremadamente delicada, con un 40% de su población bajo la condición de desnutrición y un 70% del país dependiendo de ayuda alimentaria, según datos de la ONU. Muchas familias temen no contar con los recursos necesarios incluso para superar este invierno, y los ciudadanos denuncian que la situación es de extrema gravedad.
Un informe de la Organización de Comida y Agricultura de la ONU proyectó que este año Corea del Norte va a contar con 860 000 toneladas menos de comida, lo que equivale al consumo de dos meses enteros.