La preocupación de Washington por las aspiraciones de China en la carrera nuclear ha cobrado fuerza.
Un informe de la Federación de Científicos Americanos (FAS, en sus siglas en inglés) alerta de que el régimen de Xi Jinping está construyendo una nueva red de silos para el lanzamiento de cabezas nucleares. El análisis, publicado el pasado lunes, recoge fotografías tomadas por satélite y sitúa el proyecto en el noroeste del país, en la región de Xinjiang.
Los investigadores calculan que el campo puede albergar hasta 110 silos. Solo unas semanas antes, el 30 de junio, The Washington Post se hizo eco de otro trabajo a cargo del Centro James Martin para los Estudios de No Proliferación que hablaba de otros 119 silos cerca de la ciudad de Yumen, una zona desértica.
Ambos informes apuntan a un cambio de estrategia de China, cuya capacidad nuclear se sitúa hoy en unas 350 cabezas nucleares, según los investigadores de FAS, una cantidad modesta si se compara con Rusia o Estados Unidos, que operan cada uno de ellos almacenes de hasta 4.000 cabezas, el 90% de las armas nucleares del planeta. El régimen chino, aún lejos de esas cifras, aprieta el acelerador. El Pentágono calculaba hace un año que sus existencias se situaban por debajo de las 200 cabezas.