Queremos ser breves porque las imágenes hablan por sí solas señores de Telefuturo, no hay excusas para ser hijos de puta.
Por un punto de rating, por una primicia o, simplemente por morbo, tuvieron la desacertada decisión de filmar y poner al aire el momento en que un padre debe reconocer a su hijo muerto; no se trata de que sea Francisco “Chiqui” Arce o Juan Pueblo, se trata de respetar el dolor más profundo que puede sentir una persona ante la más antinatural de las situaciones, la muerte de un hijo.
Desde mi punto de vista, las disculpas no van a alcanzar esta vez, la desgracia de un padre no es ni debe ser nunca la excusa para obtener un punto de rating.