“En ambientes diplomáticos uruguayos está creciendo la idea de que China no le está dando mayor importancia a avanzar en un TLC con Uruguay”. Así explicó el semanario Búsqueda en su edición del jueves 20, en base a informantes de la diplomacia uruguaya, cuál es el ritmo de las negociaciones con el principal destino de las exportaciones uruguayas.
Al freno chino se suma la posición del país en la interna del Mercosur. En diciembre, el gobierno de Luis Lacalle Pou decidió no respaldar la baja del arancel externo común un 10%, que solicitó Brasil y respaldaron Argentina y Paraguay.
El presidente brasileño declaró a la radio Sarandí, de Rio Grande do Sul: “El tema Mercosur es siempre inestable, con sus pros y contras. En este momento Uruguay quiere comprar todo lo que viene de China directamente, independientemente de la cláusula de barrera. Es un problema que estamos enfrentando”.
La relación con Argentina en el seno del acuerdo regional se empantanó con la calificación de lastre al Mercosur, que Luis Lacalle Pou declaró durante la cumbre que celebró los 30 años de vida del bloque, desde el Tratado de Asunción. La respuesta del presidente pro tempore del Mercosur fue en el mismo momento: invitó a su par uruguayo a “abandonar el barco”.
Ni siquiera el gobierno paraguayo respaldó la posibilidad de dialogar con China y acordar a diferentes velocidades. «Paraguay sigue sosteniendo su posición de ser fiel a lo establecido en el tratado fundacional y en el protocolo de Ouro Preto». Es decir, el acuerdo es entre los cuatro o con ninguno.
En julio de 2021, el analista internacional Álvaro Padrón dijo en su columna en M24 que no era cierto, como afirmaba el gobierno, que el mundo se dirigía hacia la libertad de comercio, recordó que en este tipo de acuerdos comerciales hay sectores que ganan y otros que pierden y que un acuerdo con China solamente ganarán los sectores agroexportadores, y alertó que Brasil estaba utilizando a Uruguay.
Estos argumentos los definió como “las tres mentiras del gobierno para hacer algo muy peligroso para el país, que es poner en riesgo la continuidad del Mercosur”.