Nativo de San Francisco, California, el obispo McElroy fue criado en el condado de San Mateo, él fue ordenado sacerdote en 1980, fue auxiliar del arzobispo Salvatore Cordileone, en San Francisco, y en 2015, el papa Francisco lo eligió para dirigir la diócesis de San Diego.
Como cardenal, a los 68 años, está dentro de la edad máxima de 80 años para votar en un futuro cónclave, y es una voz que se escucha con frecuencia en el debate sobre la «coherencia eucarística».
McElroy ha afirmado enérgicamente su punto de vista de que la Eucaristía no debe negarse a los políticos que apoyan la legalización del aborto.
Los clérigos conservadores estadounidenses han ensayado esa acción punitiva contra el presidente Joe Biden y contra la representante por California, Nancy Pelosi, titular de la Cámara Baja federal, ambos católicos apostólicos romanos.
En 2020, cuando faltaban algunas semanas para las elecciones presidenciales de USA, McElroy criticó a quienes cuestionaban la fe católica personal de Biden en función de sus posiciones sobre el aborto, y lo denunció como «un asalto al significado de lo que es ser católico».