El presidente de la Federación de Cooperativas de Producción (Fecoprod), Alfred Fast, expresó que las recientes lluvias generaron expectativas positivas para el próximo año, pese a la persistente baja en la cotización internacional de la soja.
En declaraciones a la Radio 780 AM, Fast señaló que 2024 fue un año desafiante, marcado por episodios de sequía en diversas zonas de la región oriental y el Chaco. Sin embargo, destacó que la situación ha mejorado en las últimas semanas gracias a las precipitaciones. “Estamos cerrando bien el año, porque ya en casi todas las regiones hubo algo de lluvia y los cultivos están desarrollándose favorablemente”, afirmó.
Respecto a la siembra de soja, Fast indicó que esta etapa ya está prácticamente finalizada, favorecida por lluvias abundantes, especialmente en el sur y este del país. “Esto generó un ambiente de optimismo y un buen desarrollo del principal cultivo oleaginoso”, explicó.
Asimismo, destacó el crecimiento del sésamo como rubro estratégico, con una participación activa de pequeños y grandes productores. Según el dirigente, las condiciones climáticas recientes permitieron revertir las proyecciones negativas asociadas al fenómeno La Niña, aunque advirtió que este podría reaparecer.
Fast expresó confianza en que el próximo año será más estable si las lluvias se mantienen. “Muy lindos están los cultivos, porque en el campo todo depende de la lluvia y el buen clima. Mirando hacia 2025, si sigue lloviendo así, será un año normal para producir bien”, sostuvo.
En cuanto a la situación del Chaco, donde la siembra suele retrasarse por la espera de lluvias, informó que algunas áreas ya están acumulando suficiente humedad para iniciar la siembra de soja y algodón. Este último rubro ha ganado terreno en la región occidental y podría tener un desempeño prometedor tras varios años afectados por la sequía.
Pese a los desafíos, Fast subrayó la capacidad de resiliencia de los productores paraguayos. “El productor nunca deja de confiar, de apostar y de producir, a pesar de las adversidades, ya sean climáticas o económicas, como los bajos precios internacionales”, enfatizó.
No obstante, señaló que estas dificultades obligan a los agricultores a ser más eficientes y creativos. “Hay que ajustarse el cinturón, ingeniarse para producir con menos recursos y seguir trabajando”, concluyó el dirigente, destacando el compromiso del sector agropecuario para enfrentar las adversidades y contribuir al desarrollo del país.