El Poder Ejecutivo Peruano aprobó un Decreto Supremo que califica como un mal a atender el transexualismo, el travestismo y las dudas relacionadas a la identidad de género.
La base que el Ministerio de Salud (MINSA) empleó para hacer esta consideración es Clasificación Internacional de Enfermedades (CIE-10) de la Organización Mundial de la Salud (OMS). De esta forma, incluyeron el contenido de este documento dentro del Plan de Aseguramiento en Salud (PEAS).
En ese sentido, los diagnósticos que figuran en la CIE-10 pasarán a ser considerados como trastornos mentales cubiertos por los servicios de salud estatales peruanos.
Ante esta noticia, miembros de la comunidad LGBT expresaron su descontento argumentando que el MINSA está utilizando información obsoleta, dado que la CIE-10 dejó de utilizarse en 2022.